El Maserati 250F fue diseñado para competir en la F-1 bajo las nuevas normas de 1954, que imponían motores atmosféricos de 2,5 litros. Colombo, ingeniero que había trabajado para Alfa Romeo y para Ferrari, diseñó el nuevo motor de 6 cilindros en línea que llego a rendir 270 HP a 7.000 rpm. y Colotti se ocupo del chasis y la estilizada carrocería de aluminio. El conjunto resultó tan equilibrado y fiable que demostró rápidamente ser un ganador.
En su debut gano las dos primeras citas de l.954: el GP de Argentina con Fangio y el GP de Bélgica 1º con Fangio y Moss en 3º posición. Considerado ya como el rival a batir, la situación cambia cuando Fangio y Moss dejan Maserati en plena temporada del 54 para correr con Mercedes.
Durante los años 54 y 55 los numerosos 250F en manos de pilotos privados consiguieron un glorioso palmares plagado de victorias, siendo considerado el bólido de carreras más eficaz y atractivo del momento. Pero finalmente fueron batidos por el Mercedes W196 en el titulo mundial. En la temporada del 56, la retirada de Mercedes no mejora la situación pues un viejo rival aparece con nueva fuerza: el Lancia D-50. Por circunstancias Lancia había cedido todo su material al equipo Ferrari y con Fangio al volante gana el mundial, relegando de nuevo a Maserati al segundo puesto.
Evolucionado técnicamente durante su largo periodo de mas de tres años en competición, por fin en 1957 el Maserati 250F se muestra imbatible y obtiene su éxito ganando con Fangio el Campeonato del Mundo, tras dura lucha con Ferrari, Vanwall y BRM.
El esfuerzo fue agotador para la compañía “Officine Alfieri Maserati», siendo el 250F el ultimo Maserati presente en un Campeonato del Mundo de F-1. ¡Se había forjado la leyenda!
Edición limitada y numerada a 1500 unidades.
